Debido a que no tenía amenazas ni problemas, la familia de Fernando de Jesús Ortega Ospino, de 33 años, cree que la bala que le impactó en el pecho y que lo mató el pasado sábado en la diagonal 64 con carrera 9L, barrio El Bosque, era para su excuñado Meisson David Ávila Prenth, de 29 años y apodado como ‘El Gordo’, quien también murió en el atentado.
“Él estaba con su cuñado en ese momento, ya que le estaba pagando la cuota al pagadiario, pero no iban a matarlo a él, porque no le conocíamos problemas. En cambio, el excuñado había salido hace un mes de la cárcel y tal vez tenía algún problema”, dijo un familiar a las afueras de Medicina Legal, quien cree que Ortega “estaba en el lugar equivocado”.
Ávila Prenth, quien recibió tres impactos de bala a manos de unos pistoleros que llegaron en una motocicleta, había salido de la Cárcel Modelo hacía un mes, por ser integrante de la banda Los Diablitos, al servicio de Los Costeños, que fue desmantelada en 2017 por dedicarse a la venta de estupefacientes en El Bosque y la extorsión en La Playa.
Por su parte, Ortega Ospino, quien tenía una anotación judicial como indiciado del delito de falsedad en documento público de 2013, dejó cuatro hijos: tres hombres y una mujer. De igual modo, se dedicaba al mototaxismo y a la pintura en cartón.
