La grandeza de Roberto Meléndez como futbolista fue tal, que nadie en Barranquilla objetó que el estadio Metropolitano fuera bautizado con su nombre, en 1991, cinco años después de su inauguración. Lo anterior fue producto de una campaña que lideró el periodista Chelo De Castro, quien quiso perpetuar la memoria del legendario ‘Flaco’ en esa obra majestuosa.
Chelo era un pelao cuando se hizo amigo de Meléndez, a quien le cargaba el maletín con el fin de lo que ingresara gratis al estadio Moderno de la calle 30. “¿Quién le iba a decir al ‘Flaco’ que aquel monito pecoso de 10 o 12 años, que iba a su casa de la calle del Sello y era apreciado por doña Tula, su madre, y sus hermanas, Rosa y Carmen, iba a hacer rebautizar un estadio con su nombre?”, recordó el veterano periodista.
Otro episodio contado por Chelo, y que tuvo como protagonista al ‘Flaco’, fue aquel cuando el entonces presidente de la República Enrique Olaya Herrera, al verlo en acción durante un campeonato nacional disputado en Medellín, en 1932, pidió que lo llevaran a su palco para conocerlo personalmente.
Aunque no hay registros estadísticos que lo corroboren, Chelo asegura que su cifra de goles merodeó los 508, lo que el propio ‘Flaco’ pensaba que era una exageración. Siempre creyó que había anotado unos 300.
Roberto Meléndez fue el primer futbolista colombiano transferido al exterior. El ‘Flaco’ actuó para el Hispanoamericano Centro Gallego de Cuba, que lo contrató en 1939. Los cubanos habían quedado impresionados con su calidad y porque, jugando para Junior y la selección Atlántico, les marcó varios goles. El presidente del club le ofreció un contrato de 50 dólares mensuales, muy bueno para la época, pero el ‘Flaco’ lo pensó mucho para aceptar la oferta. La aterraba la idea de tener que dejar sola a su esposa y a sus hijos. Finalmente aceptó la propuesta y contó hasta la forma como iba a dividir su salario: “Le mando 30 dólares a Carmen (su esposa) y me quedo con 20”. También reveló que fue y se vino en barco.
La aventura del ‘Flaco’ Meléndez en Cuba duró poco ya que estando allá lo sorprendió el estallido de la Segunda Guerra Mundial, por lo que tuvo que regresar a Colombia.
El ‘Flaco’ contaba con orgullo que, en su casa, ubicada en la parte de atrás del Colegio San José, se formó el Junior que participaría en el primer campeonato de fútbol profesional en Colombia. Meléndez fue nombrado director técnico y condujo al equipo rojiblanco al subtítulo. También dirigió la Selección Colombia que participó en el Campeonato Sudamericano de 1945, en Chile y el de 1949, en Río de Janeiro. En este último, Junior acudió en representación de Colombia, lo que originó fue fuera sancionado por tres años por la Dimayor, que en ese tiempo sostenía una pugna con la Adefútbol.
En ese Junior del 48 dirigido por el ‘Flaco’ estaban jugadores como Rigoberto ‘Memuerde’ García, Octavio ‘Tolimita’ Ruiz, Fulgencio Berdugo, Lancaster De León, Dagoberto Ojeda, Humberto Picalúa, Arturo ‘Guarapo’ Mendoza, Boris Rodríguez, Octavio Carrillo, Luis González Rubio, José Escorcia, Marco Mejía y Carlos Gastelbondo, entre otros.
A pesar de que el Metropolitano llevaba su nombre y Junior le había otorgado un puesto de privilegio en este escenario, el ‘Flaco’ nunca lo ocupó. Consideraba un irrespeto hacia sus compañeros que él estuviera en un puesto en numerada y ellos en cualquier otra parte.
El ‘Flaco’ llegó al Juventud Junior en 1930, con 18 años. Actuaba en la posición de interior izquierdo y lo que más resaltan los cronistas de la época era la potencia de su disparo con ambas piernas, especialmente la zurda. Incluso, cuentan que arquero que deseara pertenecer al equipo barranquillero en ese entonces debía pasar por la prueba de contener sus fuertes remates.
Sobre este particular, Jimmy De la Espriella, quien fue portero del Junior entre los años 50 y 60, le contó a Chelo De Castro que el ‘Flaco’, con 48 o 50 años a cuestas, le pateó varios tiros que lo estremecieron de pies cabeza. De la Espriella decía que no quería imaginarse la violencia con la que pateaba en su juventud.
El propio ‘Flaco’ contaba que el secreto de su fuerte zapatazo estaba en haber pateado desde pelao balones de cuero mojados. “Muchos jugadores que recibieron remates míos quedaban resentidos o privados”, relató en una oportunidad.
Además del fútbol, el ‘Flaco’ Meléndez también practicó béisbol, tenis, tenis y baloncesto. Se desempeñó como profesor de educación física en los colegios Colón y Americano.
Uno de los grandes sueños fue asistir a un Mundial. Esto lo logró en 1982 gracias a una campaña que adelantó Fabio Poveda Márquez, quien le consiguió patrocinio con la empresa privada. El ‘Flaco’ también asistió a la Copa Mundo de México 86, gracias a la ayuda de su gran amigo Carlos Recio.
El ‘Flaco’ Meléndez nació el 31 de marzo de 1912 y falleció el 20 de mayo del 2000, a los 88 años. Su féretro fue cubierto con una bandera del Junior y el día de su sepelio fue llevado al estadio Metropolitano, el mismo que el 17 de marzo de 1991 fue bautizado con su nombre. Ese domingo 21 de mayo, Junior se enfrentaba al Real Cartagena y el público no paró de corear “¡Flaco, flaco, flaco!”.
Por Manuel Ortega Ponce
Autor: Manuel Ortega Ponce
Comunicador social-periodista egresado de la Universidad Autónoma del Caribe. Toda una vida ligada al deporte y a la información que este genera.