Barranquilla. -En el Ecoparque Mallorquín habrá una estación científica para monitoreo ambiental y tener alertas tempranas de un ecosistema considerado estratégico para la ciudad de Barranquilla frente al cambio climático.
“Contará con un laboratorio que haremos en asocio con la Universidad Simón Bolívar: nosotros damos el espacio y ellos irán a hacer investigaciones, pedagogía y clases sobre utilizar la naturaleza para generar grandes cambios”, dio a conocer el alcalde Jaime Pumarejo Heins.
La estación ocupará 225,1 metros cuadrados. En más de la mitad (160 m2) funcionarán una esclusa, una bodega y laboratorios multipropósito, de microbiología aplicada, de sensores remotos y ecología del paisaje. El resto será para labores administrativas.
La unidad será adecuada y dotada por Unisimón en la segunda etapa del complejo, la cual todavía no ha sido habilitada para el público. Luego será direccionada por su Centro de Investigación e Innovación en Biodiversidad y Cambio Climático, Adaptia.
“Nos permitirá estudiar y entender un cuerpo de agua y el bosque de manglar de la Ciénaga de Mallorquín”, agregó Pumarejo. “Estamos muy contentos de que esto pueda hacerse y orgulloso de que una universidad barranquillera tome la delantera y nos acompañe en esta loable tarea de conservar y utilizar adecuadamente nuestro medioambiente”.
Sistema de alertas
Antes de su potencial turístico, la Ciénaga de Mallorquín es un pulmón urbano cuya ubicación la convierte en la primera barrera de Barranquilla contra fenómenos que han ido en aumento por el cambio climático, entre esos el incremento del nivel del mar, las tormentas tropicales y los huracanes.
“Es una excelente oportunidad para fomentar la investigación en la ciudad y el departamento, integrando a la Academia, el Estado, la comunidad y las empresas privadas, con el fin de generar nuevo conocimiento y promover la conservación y la protección de los ecosistemas”, aseguró la profesora e investigadora Yani Aranguren Díaz, directora de Adaptia.
El equipo de especialistas de la estación científica realizará labores de estudio y conservación del bosque de manglar, recolección y procedimientos preanalíticos de muestras biológicas y ambientales, estudio y análisis de la biodiversidad del ecosistema, preservación de material biológico, entre otros. Además, actividades académicas y formativas con visitantes, comunidades locales, y estudiantes de pregrado y posgrado.
Para el monitoreo ambiental se emplearán sensores que medirán parámetros de la vegetación, el clima, el agua y las características fisicoquímicas de los suelos. La data generada alimentará un programa de inteligencia artificial, con el cual se implementará un sistema de alertas tempranas que permita tomar decisiones con base científica para hacer frente a los efectos del cambio climático.
“Pretendemos dar solución a dos escenarios relacionados con la emergencia climática: la salinidad de los suelos en la región Caribe y las sequías que se pronostican en las próximas décadas”, explicó María Auxiliadora Iglesias, directora del Grupo de Investigación Bio-Organizaciones de Unisimón.
En los últimos ocho años, el grupo ha realizado estudios sobre los bosques de manglar del departamento del Atlántico. En uno, que incluyó a Mallorquín, evidenciaron que de 1998 al 2013 la ciénaga perdió alrededor de 51 hectáreas en su parte sur como consecuencia de la tala ilegal, acumulación de desechos y expansión urbana. Sin embargo, a partir de 2013 su cubierta de manglares mejoró por la aparición de un banco de arena que protegió su barra natural de la erosión y las campañas de reforestación que se han llevado a cabo.
“Para nosotros es un laboratorio vivo donde hemos hecho y seguiremos haciendo estudios en tiempo real”, enfatizó el profesor Hernando Bolívar Anillo.
Campaña ‘365 por Mallorquín’
Restaurar y preservar el entorno de la Ciénaga es el compromiso de una campaña encabezada por profesores y estudiantes de las facultades de Ingenierías y Ciencias Básicas y Biomédicas de Unisimón, quienes promueven la conciencia ambiental y la participación comunitaria por medio de estrategias centradas en eliminar desechos y reducir la contaminación en la zona costera del Atlántico.
‘365 por Mallorquín’ incluye jornadas de limpieza en las áreas más afectadas del Ecoparque –la primera se realizó el pasado 16 de septiembre–; el desarrollo de sistemas tecnológicos y estructurales para retener, eliminar y almacenar basura, al igual que programas que involucren a las comunidades locales y visitantes en el cuidado del entorno.
Por: El Heraldo