Desde Barranquilla, el aspirante a la Presidencia, Germán Vargas Lleras, desmintió que su movimiento político esté en conversaciones con el Centro Democrático y otras corrientes políticas para reforzar su candidatura.
Al ser preguntado sobre los rumores de un posible acuerdo con el partido del expresidente Uribe, aseguró que “Yo no estoy contemplando en este momento ninguna alianza”, para luego volver a poner el foco en el programa de Gobierno que está promoviendo en diversas ciudades del país.
El exvicepresidente opinó sobre la polémica por el hundimiento o aprobación de las circunscripciones de paz, una polémica que enfrenta tanto al Gobierno como a la oposición debido al quórum durante la votación en el Senado.
Sobre la demanda que el Gobierno presentará ante el Consejo de Estado para la aprobación definitiva de las curules, opinó “un proyecto tan controvertido como ese, donde no está claro que realmente vayan a ser las víctimas quienes obtengan esa representación, no puede ser aprobado de esa forma”.
Por el contrario, sugirió al Gobierno volver a tramitar el proyecto por la vía ordinaria en el Congreso y conseguir los apoyos necesarios para que este cobre vida.
Recordó que “el proyecto fue votado en dos ocasiones distintas. Cuando yo era presidente del Congreso eso no ocurría. Y la mitad más uno… Esas cuentas no me cuadran”.
Vargas Lleras dio a conocer su agenda de trabajo que en materia de infraestructura implementará de llegar a la Presidencia. En cuanto a Barranquilla prometió concluir la carrera 38 y financiar el metro ligero entre la ciudad y Soledad por medio de una sobretasa por el uso del aeropuerto a los usuarios.
Hizo referencia, además, al atraso en la construcción del nuevo Puente Pumarejo. Aseguró que “nos quedaron haciendo falta 150.000 millones”, aunque dio a entender que estos recursos ya se están gestionando. Esto podría permitir que la obra sea inaugurada “en julio del año 2018”.