¡Justicia! ¡Justicia! ¡Justicia! Eran las arengas que se escuchaban al unísono en el jardín 10, al pie de la bóveda 178 del Cementerio Jardines de la Eternidad Sur. Allí, con rostros de dolor e impotencia, bajo el sol canicular que hacía este lunes a las 2 de la tarde, familiares y amigos le dieron el último adiós a Derly Rodríguez Cogollo, la mujer hallada muerta en el km 20 de la vía Barranquilla-Ciénaga.
Las pancartas, que acompañaban las exclamaciones de indignación, tenían escritas a puño y letra una misma petición: “Que el crimen de Derly no quede en la impunidad y que sobre Rafael Jimeno Martínez caiga todo el peso de la Ley”.
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Para la familia Rodríguez Cogollo, a medida que van transcurriendo las horas siguen apareciendo evidencias y testimonios que señalan a Jimeno como el principal sospechoso del asesinato de la ama de casa.
La madrastra de la víctima, Gladis Oviedo, contó a Hora 7/24 que el sábado viajó a primera hora al municipio de Ciénaga y se presentó en las instalaciones de Medicina Legal como familiar de Derly. El vigilante revisó su minuta y le confirmó que ese cadáver ya estaba en proceso de retiro por parte de un hombre que aseguró ser la pareja sentimental.
“Yo me exalté y le dije al vigilante que no había podido ir ningún familiar a reclamarla, porque su familia éramos nosotros. Él me dijo que el tipo había ido con la cédula de ella. Por eso no nos cabe duda que fue él, porque Rafael siempre andaba con los papeles de Derly”, relató la mujer.
El guarda de seguridad consultó con la trabajadora social del Instituto y esta le confirmó que el cadáver había sido trasladado a Medicina Legal en Santa Marta. Esto generó algo de alivio en medio de la aflicción de Gladis.
Al llegar a la entidad forense en la capital del Magdalena, la mujer se entrevistó con la trabajadora social y allí le confirmaron que la muerte fue causada “por una agresión brutal con objeto contundente, que Derly tenía todo el rostro desfigurado y que esperarían los resultados de la necropsia para determinar si además había presencia de fluido seminal en sus genitales, producto de un supuesto acceso carnal abusivo”.
Derly habló del acoso
El miércoles 15 de noviembre, es decir, una semana antes del día en que Derly salió de su casa para jamás volver, a las 9:52 de la noche habló por el Messenger de Facebook con una amiga, a la que le confesó que Rafael se metía en su vida, pese a que la relación entre ambos ya había terminado hacía un año.
Dos días después, o sea el viernes 17, Rafael Jimeno llegó a la casa de Claudiris Conrado, una cuñada de Derly, para dejarle un recado al que fue su suegro.
“Me dijo que le advirtiera a mi suegro para le dijera a Derly que se cuidara, porque la andaban buscando para matarla. Viéndolo bien, estaba abonando el terreno para evadir fácilmente la responsabilidad que hoy recae sobre él”, expresó indignada.
Hasta que llegó aquel fatídico miércoles 22 de noviembre. La hoy occisa salió de casa a las 7:30 de la mañana, pero antes despertó a su hijo Harold Sanjuán, de 15 años.
“Me dijo: ‘hijo, mira bien lo que tengo puesto, porque siento que me va a pasar algo, tengo un mal presentimiento’. El man (Rafael) como que ya tenía todo planeado”, dijo el joven, mientras era consolado por otros familiares en el camposanto.

Acto seguido reveló el verdadero motivo por el que su madre, pese a estar fastidiada del constante acoso de Rafael Jimeno, decidió acompañarlo.
“Mi mamá estaba saliendo con otro señor, pero Rafael aun así la seguía molestando, y le dijo: ‘ese man tiene mujer y tiene hijos’, pero ella no le creía. Entonces él volvió a decirle: ‘si quieres te muestro pruebas, vamos a ver’. Y ella salió fue a eso”, agregó el muchacho destrozado, con sus pestañas humedecidas de tanto llorar.
Exigen justicia
Josefa Cogollo, madre biológica de Derly, llorando y a punto de desmayarse, elevó una petición a las autoridades para que el crimen de su hija no quede en la impunidad.
“Que capturen y castiguen a ese asesino. Mi hija no merecía esa muerte tan horrible. Hubo golpes, abuso sexual y luego le puso unos troncos encima para que no se le viera la cara. Mi hija quedó irreconocible”, expresó inconsolable.

El paradero de Rafael Jimeno Martínez es incierto para las autoridades. “En el cielo hay un Dios y se va a hacer justicia. Es mejor que se entregue. No hay duda de que fue él quien mató a Derly”, agregó la cuñada Claudiris, apoyada por todos los asistentes al sepelio.
Van 20 feminicidios en el Atlántico
Aunque este hecho no ocurrió en el territorio atlanticense, el rechazo de la Red de Mujeres contra la Violencia en el Atlántico no se hizo esperar. La coordinadora de este grupo activista, Emma Doris López Rodríguez, se mostró indignada por este atroz crimen y preocupada por el aumento progresivo de feminicidios.
“Triste que a pocos días de haberse conmemorado el Día de la No Violencia Contra la Mujer, sucedan estos hechos tan dolorosos. Con el caso de Derly -que vivía en Los Robles- son 46 mujeres asesinadas y 20 feminicidios en lo corrido del 2017 en el departamento del Atlántico. Esta es una cifra alarmante, teniendo en cuenta que en el 2016 la cifra se elevó a 54 y aún hace falta el mes de diciembre. ¡No más violencia contra las mujeres!”, pidió López a la sociedad, en entrevista con Hora 7/24.