Barranquilla, Atlántico.- Se merecía un partido así. Luis Fernando Díaz Marulanda luchó desde el primer minuto del partido en que Colombia derrotó 2-1 a Brasil este jueves en el Metropolitano y su sacrificio terminó teniendo una recompensa más que merecida.
El extremo guajiro anotó los dos goles del triunfo y tuvo su mejor partido, hasta ahora, con el combinado nacional. Pero no solo fueron sus tantos, sino su despliegue, sus ganas, su jerarquía, su empuje y el siempre ser el que intentara llevar al equipo para adelante lo que hizo ganarse los aplausos de todo el público presente en el ‘Coloso de la Ciudadela’.
Y es que el hombre del Liverpool tenía una motivación extra para afrontar este encuentro. Sus padres, Luis Manuel y Cilenis Marulanda, los cuales estuvieron secuestrados, estuvieron presentes en el compromiso y para ellos, dijo el futbolista, fueron sus goles.
“Esto es para mi familia, para mis padres, que siempre estuvieron ahí en estos momentos difíciles. Estoy contento por marcar, por el delantero vive de eso y en la Selección me hacía falta unos goles”, manifestó en zona mixta.
“En Colombia hay mucha más gente buena que mala. Con lo que hemos demostrado en esta semana que pasó, quedó claro que hemos hecho cosas buenas. Las personas que están pasando por ese momento no se los deseo a nadie. Las personas que están pasando por eso les digo que se encomienden a Dios”, complementó.
El atacante aseguró que está muy emocionado por lo que está viviendo: “Estoy muy contento, agradecido con los dos goles, por haberle dado el triunfo a la Selección y contento por todo lo que hicieron mis compañeros”.
Por último, ‘Luchito’ se refirió a lo que le dijo su compañero en el conjunto inglés, Alisson, luego del encuentro en la capital del Atlántico.
“Él supo los momentos que hemos pasado, me dio un abrazo y me deseó lo mejor, igualmente también le deseo lo mejor afuera de la cancha, es una gran persona, le agradezco y lo quiero mucho”, concluyó.
Nota por: El Heraldo
